viernes, 23 de enero de 2009

La sinfonía nº4, de Ustvolskaya


Pues sí, amigo Pool. Como bien dices, la señora Galina fue alumna de Dimitri Shostakovich, así que la obra de esta semana viene como anillo al dedo. Por lo visto, según dicen las malas lenguas, tuvieron algo más que una relación entre alumna y profesor, y parece ser que fue cuando Dimitri le pidió matrimonio, cuando ella, no sólo le dijo que no, sino que dejó de hablarle. Eso cuentan las viejecillas del lugar.

La música de esta mujer es tremendamente personal. Cuando escuchamos algo de Ustvolskaya por primera vez, tenemos la sensación de estar descubriendo un estilo de música totalmente nuevo. No se parece a nada que hayamos escuchado antes, y probablemente no se parezca a nada que escuchemos después. (A no ser, claro, que te enganche y decidas seguir escuchando más música de la misma compositora).

Es difícil hablar de su estilo. Ella nunca ha hablado de su música. Tampoco nunca ha aceptado un encargo, ni ha hecho apariciones públicas ni apenas existen fotos de ella. Visto así, es normal que sea tan poco conocida. Una vez, por fin, accedió a dar una conferencia para hablar de su propia obra. Parece ser que cuando subió al estrado, dijo algo así como: “Es difícil hablar sobre la música de uno... mi habilidad para componer música desafortunadamente no coincide con mi habilidad para hablar sobre ella...” y ahí terminó todo. En otra ocasión, también accedió a hablar de su música en Hamburgo, (a esta conferencia a punto estuve de ir yo) pero fue cancelada por motivos de salud. (Menos mal que aún no me había comprado el billete de avión…)



Una de las características más extrañas de su música, son las extrañísimas combinaciones instrumentales. Si habéis escuchado ya la pieza, os habréis encontrado, con una sinfonía para mezzo-soprano, trompeta, piano y tam-tam. Y esta combinación, en cualquier parte del mundo es, cuando menos, rara. Otra obra, composición 2, fue escrita, si la memoria no me falla, para ocho contrabajos, flautín y piano. El piano siempre suele ser una constante en su música.

Por otro lado, Galina Ustvolskaya era una mujer profundamente religiosa, y me atrevería a decir que profundamente mística. Toda su música está cargada de espiritualidad, aunque en una primera escucha nos pueda echar para atrás. Un crítico danés la calificó como “La dama del martillo” y es uno de los pocos ejemplos que conozco en que el volumen al que la escuchemos influirá profundamente en nuestra percepción de la obra. Para disfrutar de la música de esta compositora, es necesario poner el volumen al máximo. ¡Pero cuidado! Nos pueden echar de casa.

Su música es especialmente difícil de encontrar en tiendas. Por eso, y sin que sirva de precedente, añado un enlace con el video. De todas formas, si queréis comprar el disco, lo ha editado un sello que se llama “Etcetera” y trae además, la 5ª sonata para piano, el gran dueto para Cello y piano y el trío, de 1949 (esa es la versión que tengo más a mano). Eso sí, si decidís preguntar por él en una tienda, id preparados para deletrear: U-S-T-V-O-L-S-K-A-Y-A

5 comentarios:

  1. GENIAL!
    Ya era hora y
    ¡QUÉ ESTRENO!

    ResponderEliminar
  2. Pues sí. Al final, la insistencia de mis lectores ha dado su fruto...
    Me alegro de que te guste!

    ResponderEliminar
  3. Maravillosa música sin duda ^^

    ResponderEliminar
  4. De tal palo tal astilla?? No me esperaba nada por el estilo, de esta señorita, desp de haber conocido un poco a Shostakovich... Yo creia que exagerabas cuando comentabas el estilo de su música... pero has clavao la descripción. Normal que sea dificil de encontrar...

    Mñna la volveré a oir, a ver si la veo con otros ojos. xD
    Un saludo y gracias por seguir escribiendo! =)

    ResponderEliminar
  5. Galina es un ser de luz y su música mola taco.

    ResponderEliminar

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails